05. Pornografía: la antesala de los abusos

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Sala 05

Linda Lovelace

actriz porno:

Cuando ustedes ven la película Garganta Profunda, están viendo cómo soy violada. Es un crimen que se siga mostrando.

(Garganta Profunda es la película pornográfica más famosa de la historia)

Paige Jennings

youtuber que abandonó la industria porno:

Un dia tenía que trabajar con un hombre que dió positivo en sífilis. Pedí que trajeran a otro actor. Me dijeron que no, así que les pedí utilizar condón. Se rieron de mí. No hice la escena y me hicieron pagar 500€ por haber perdido un día de grabación.

Shelley Lubben

actriz porno:

Las mujeres son forzadas y coaccionadas por sus compañeros de rodaje, agredidas verbal y físicamente, inducidas al alcoholismo y las drogas, violadas y obligadas a realizar actos sexuales que no desean.

Shelley Lubben ha creado la Pink Cross Foundation para denunciar estos abusos

La actriz Nikki Benz

sufrió una violación mientras rodaba una película. Según el informe policial, fue amordazada y el director se acercó por detrás para intentar asfixiarla. Le arrancó la ropa interior a mordiscos y la penetró tan fuerte que «la sangre salpicó las paredes blancas».

Solo con poner ‘tetas’ o ‘culo’ en internet salen páginas pornográficas, asequibles y gratuitas.

 

Perpetúa los roles de género:

los hombres como agresores y poderosos; las mujeres como mercancías sexuales y sumisas.

Se erotiza la violencia y se asume como «normal» en las relaciones sexuales.

No muestra relaciones igualitarias y respetuosas.

Hay personas que acceden a práctricas sexuales que no quieren porque sus parejas se lo han pedido.

Frustración en las relaciones sexuales de pareja porque no son tan ‘excitantes’ como los vídeos porno.

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